Eres...
mi caricia,
mi refugio,
mi sosiego,
mi bálsamo,
mi tempestad...
Me calmas,
me alzas,
me ofreces,
me tienes,
en la mañana,
durante el día,
en el atardecer
y en el anochecer.
Tus cálidas palabras
me bañan en la mañana,
tu mirada se enlaza con la mía
en el día a día,
tu abrazo lo siento en mi ser
en el atardecer,
y tus besos rozan mi piel
en el anochecer.