Lo amo tanto, a mi pesar; Aunque yo vuelva a nacer, lo
he de volver a querer; aunque me vuelva a matar.
Esta tú imagen que admiro, tan pegada a mi deseo; que
si al espejo me miro, en vez de verme de
veo.
Perdí media vida mía, por cierto placer fatal; y la
otra media daría, por otro placer igual.