Hoy les cuento
que de aquel amor eterno
ya no hablo ni presumo
sólo queda algún recuerdo
se ha perdido
aunque dijo que me amaba
que yo era su motivo
desde que se levantaba
y envolvió mis letras
en un lecho de amor
con su mirada
y se fué sin temor
y dejó aquel dolor
que ya no sana nada